LA ESPERA

Cecilia no es una chica normal. No se levanta temprano para maquillarse, su belleza natural la obliga a dormir más de ocho horas para estar radiante, y no necesita mentirse como las demás con esos maquillajes superficiales, y ede superficial sólo tiene el suelo que pisa.
Sus ojos realmente dicen más que mil palabras, y sus palabras muchas veces son más sinceras de lo que deberían. Puede ser que eso sea lo que más me guste, pero también puede ser lo que más odie de ella, sobre todo esos días en los que me llega al pincho la vida, y sobre todo las verdades que me dice.
Cuándo quiere algo, lo toma sin pedir permiso a nadie. Si alguien le gusta se lo chapa sin importarle el que dirán. En el fondo la vida debe ser así, tienes que tomar lo que quieres.
Me enteré que me quería conocer, tal vez usarme para luego dejarme totalmente ilusionado como hacía con todos. La verdad es que su belleza ameritaba un suicidio masivo de los pobres tontos que le creían lo poco que les decía. Esa tarde me abordó y me dijo para ir a tomar un café. Yo empecé a dejarme seducir hasta caer rendido a sus pies, en el momento del eminente beso algo sucedió que me frenó. No pude acercar mi boca a la suya, al menos con el feroz ritmo que ella llevaba. En ese instante pude comprender que con Cecilia nunca podría ser, probando sus labios de miel encontré las respuestas que necesitaba sobre ella, me prometió volvernos a ver al día siguiente.
Han pasado dos semanas de eso, y desde ese día no la he visto caminar por los pasillos de la universidad. Hoy me enteré que no la volveré a ver. Dejó la universidad para irse a Estados Unidos a trabajar, tal vez y no la vuelva a ver más. Supongo que me tengo que sumar a esa enorme lista de eternos enamorados que la esperaron como yo por dos semanas, o tal vez más, con tal de volver a probar ese elíxir que a todos nos dio a cuentagotas. Y es que Cecilia no es una chica normal.

BASURERO

DESAMOR

Vestido como intelectual esperando que me mandes el mensajito ese que me prometiste para ver si salíamos a conversar un rato. Revisando ese puto celular cada minuto para ver si no sentí el mensaje, para ver si no se quedó sin batería, pareciendo tía treintona que se le va el tren, esperanzado a esa señal tuya que nunca llega.

Si yo sólo quiero caminar contigo y sentir ¿mariposas? en el estómago, pero al darme cuenta de que hoy no habrá mensaje no siento mariposas sino siento que te quiero mandar a la mierda y odiarte para siempre, pero eres tan linda que sé que no podré.
Sin crédito en ese aparatito de mierda, sin un sol en el bolsillo para ir al teléfono público de telefónica, y gracias a Tongo saber que la llamada cuesta una china, y escuchar tu voz por un efímero minuto que en realidad son 50 segundos, 50 orgásmicos segunditos en los que me dices que tienes que cuidar a tu abuela, o que tienes mucho por estudiar, o que tu mamá no te da permiso, o las tres excusas juntas, y yo pensando mil estrategias para tratar de verte, pero al final la llamada termina, pero no con ella el amor que éste cada vez más ilusionado huevonaso va sintiendo por ti, mi amada y excusada dama, por que las excusas yo te las excuso para sentir que mañana por fin te atreverás a llamarme y decirme que aceptas ir a dar una vuelta conmigo, que chucha aunque sea a la esquina de tu casa a comprar el pan, que si quieres de paso lo pago yo.

Otra mañana más y tú nada de manifestarte mi princesa de chocolate, que cada día supongo se derrite un poquito más. Me llega al chopin ser ese eterno ilusionado que siempre da esperando recibir, aunque sea un besito chiquito con sabor a nada, sólo para sentir que quieres un poquito conmigo, sólo para atreverme a robarte un pico al momento de despedirnos cuándo me digas que ya es tarde y que te cagas de sueño, lo sé, este looser te aburrió más que los documentales de History Channel. Sí me atreviera a robarte ese besito que al día siguiente se iría convirtiendo además en abrazito y cogidita de cintura, para que a la semana se cambie por una arrinconadita contra la pared, y para que en menos de un mes se canjee con un vale en un telo de 15 lucas no más para ese ansiado encuentro cuerpo a cuerpo, para dejar de una vez por todas de estar como perrito en azotea.

Por mi madre que mañana te jodo todo el día a punta de mensajitos ridículos y llamadas melosas con tal de salir contigo, acompañarte a tu casa y darte ese besito que signifique el inicio del fin de lo que algún día será.

SENTIDOS

FLASHBACK

Esa mañana que tomamos tres rones hasta el mediodía.
Esa noche del taxi fuga, en la que el Colo nos hubiera dicho “yo pago”, no corran que van a vomitar.
Esa noche que agarramos a patadas un teléfono público por haberme tragado un sol.
Esa tarde en la que lloraste conmigo después de haberte tomado una botella de ron, porque ella no quería nada contigo.
Esa noche que fuimos a la casa del chato jurando que no necesitaríamos mujeres, y terminamos bailando entre hombres.
Esa misma noche que perdiste intentando hacer más planchas que un Militar.
Esa noche de la despedida del “Carita”, donde todos nos discurseamos sobre la amistad.
Esa noche de año nuevo que casi te peleas porque le miraban las piernas a tu flaca.
Esa noche cuando nos dijiste “les gusta, pe’ huevones, les gusta!”
Ese carnaval que resultamos chupando con desconocidos y prometimos atarnos entre todos con una soga el próximo año para no perdernos.
Esa madrugada que pasamos por Cristo Rey y cantamos el himno marista.
Esa noche de año nuevo que abriste el refrigerador pensando que era el baño.
Esa noche que te afeitaron las cejas.
Esa tarde que nos botaron del “Queirolo” por estar cayéndonos de borrachos.
Esa noche que te prometí que nunca más la volvería a ver…pero todos sabemos como es la tentación.
Esa noche que me contaste como ella ya no te contestaba el teléfono.
Esa tarde antes del concierto de “Soda”
Esa noche en Barranco que perdiste tus lentes por entrar a poguear “Por los caminos del alcohol”
Esa noche que le mentaste la madre a un huevón y tuvieron que cerrar el bar para que no nos saquen la mierda.
Esa tarde en esa unsha que perdimos el control “hasta que nos orinen los perros”
Esa tarde cuando los dos lloramos. Yo por la amistad y tú por la distancia...

Y esta noche, esta noche sólo necesito que alguno de ustedes esté aquí conmigo mientras tomo esta cerveza...que la verdad, no sabe igual.

PALABRAS DE ¿AMOR?

"HÓY el agüita salada

no es de la mar

es de tanto querer

de tanto llorar"

Luis Hernández

"Lo malo es que eres muy bueno…para mí"

"No siento los “te quiero” que me dices"

"Quisiera que seamos amigos, pero como eres un resentido no va a poder ser"

"Quiero besar a otra, pero no sé a quién"

"Te siento muy seco, y no es por el teléfono"

"Lo besé porque ya me cansé de ti"

"Te tengo que cortar el teléfono porque estoy con mi enamorado"

- ¿Tu mejor amigo no te dijo que me gustas?
- No, pero me dijo que le gustas tú.

"No sabes lo difícil que es estar contigo y con él, no se lo deseo a nadie"

"Lo siento pero en mis planes no estás tú…en mis planes ni siquiera estoy yo"

Moraleja: Cuándo pienses que todo se va a la mierda, no te preocupes...mejor piensa que siempre vendrá algo peor.