Las manos me sudaban como nunca. Los nervios iban a terminar conmigo. Por fin lo iba a conocer.
Nunca había estado en ese lugar. Cuándo llegó, mi corazón empezó a latir a 1000.
- Maestro.
- Hola.
Nunca había estado en ese lugar. Cuándo llegó, mi corazón empezó a latir a 1000.
- Maestro.
- Hola.
No supe bien que decir ni que hacer, me rasqué la cabeza y empecé a realizar ese tic que se me había pegado unas semanas antes.
- No sabe cuanto lo quería conocer. Justo hoy se cumple un año del día en que estuve a punto de darle la mano y cumplir con uno de mis sueños.
- No me digas (expresión de aburrimiento)
- Si, se lo juro. Hace un año usted fue para no sé que mierda a Trujillo, hasta un video había hecho para que sepa que existo.
- Mmmmm.
- No sabe cuanto lo quería conocer. Justo hoy se cumple un año del día en que estuve a punto de darle la mano y cumplir con uno de mis sueños.
- No me digas (expresión de aburrimiento)
- Si, se lo juro. Hace un año usted fue para no sé que mierda a Trujillo, hasta un video había hecho para que sepa que existo.
- Mmmmm.
A estas alturas el gran Alfredito seguro estaba pensando que ya se chocó con otro iluso que cree que iba a tomarse cinco minutos de su alcohólico tiempo para chequear una idiotez de esas que hacen para decir que en este país todavía hay artistas emergentes.
- En serio. Pero no fui.
- Ah ya. Voy recordando Trujillo. Cómo te pudiste perder la charla con mis amigos de siempre donde hablamos de todo un poco, pero sobre todo del alcohol, de la amistad y del amor.
- Fue exactamente eso, el amor. Me quedé aquí por amor.
- Bueno ahí como que cambia la cosa. Eso se puede perdonar. Pero como que me vas contando sírveme un vodka para ver si puedo recrear tu historia en París.
- Claro maestro, yo encantado de que mi puta vida le sirva de inspiración…
- En serio. Pero no fui.
- Ah ya. Voy recordando Trujillo. Cómo te pudiste perder la charla con mis amigos de siempre donde hablamos de todo un poco, pero sobre todo del alcohol, de la amistad y del amor.
- Fue exactamente eso, el amor. Me quedé aquí por amor.
- Bueno ahí como que cambia la cosa. Eso se puede perdonar. Pero como que me vas contando sírveme un vodka para ver si puedo recrear tu historia en París.
- Claro maestro, yo encantado de que mi puta vida le sirva de inspiración…
Me desperté porque mi vieja me dijo que me llamaban por teléfono.
- ¿Aló? (resaca de mierda, ya no me persigas más)
- Oe pobrehuevón te estamos esperando para salir al carnavalón, ¿vas a venir?
- Puta madre, ya voy.
- Apura pe’ que ya vamos a comprar los rones.
- Oe no jodas. Sólo por hoy quiero tomar vodka, es que quiero celebrar y brindar con Bryce que hoy se cumple un año del día en que no lo conocí.
- ¿Aló? (resaca de mierda, ya no me persigas más)
- Oe pobrehuevón te estamos esperando para salir al carnavalón, ¿vas a venir?
- Puta madre, ya voy.
- Apura pe’ que ya vamos a comprar los rones.
- Oe no jodas. Sólo por hoy quiero tomar vodka, es que quiero celebrar y brindar con Bryce que hoy se cumple un año del día en que no lo conocí.
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