LECCIÓN 1 del Manual del Periodismo…¿del actual y buen periodismo?
Lo que vende es lo que puede generar emociones.
Tomando esta premisa, desde hace dos semanas los medios nos bombardean todos los días con escenas totalmente arrolladoras de dolor, que nosotros al frente de nuestra TV y echados cómodamente en nuestras calientes camitas, vemos como meros espectadores, levantándonos al día siguiente creyendo que lo que vimos fue parte de una irrealidad… es el efecto “no sé que mierda” ese que nos produce esa sensación (maldita televisión).
Pero regresemos a nuestras cada vez más cómodas camitas ¿ya?
Miles de imágenes se me vienen a la mente, gente llorando por la pérdida de sus seres queridos, de sus casas… y de todo lo que con un huevo de esfuerzo llegaron a realizar a lo largo de una vida llena de sufrimientos (bienaventurados los pobres…que son los más en esta triste historia y que son los que siempre sufrirán)
Me siguen bombardeando con imágenes de gente regada en las plazas de armas, muertos inertes que ya no sufrirán más…curiosamente una cámara se queda fija hasta que alguien reconoce a un hijo, un sobrino, un padre o una madre y se echa a llorar como un niño totalmente indefenso que se perdió una tarde mientras paseaba con sus padres, indefenso, totalmente desamparado ante la fuerza de la naturaleza, ante la inclemencia y los designios de Dios. (¿Dios sabe realmente lo que hace?)
Entrevistas, testimonios y más imágenes a lo largo de los días llegan a mi televisor. “¿Por qué nos has hecho esto Dios?”, más que a pregunta suena a reclamo totalmente archivado y guardado en una fría oficina del poder judicial, porque ya sabemos que ningún reclamo es válido ya.
“Lloraremos a nuestros muertos, y luego a volver a reconstruir nuestras casas y a empezar de nuevo”, sentencia un señor que estoy seguro tiene el dolor más grande del mundo clavado en todo su ser (como todos por allá)…pero que más le queda, si ya no tiene otra salida.
Pero más allá de los bombardeos de dolor que veo todas las noches en mi TV, los medios también se encargaron de unirnos como hermanos, y poder apoyar en algo a la gente que realmente la está pasando hasta la hueva; al menos algo de tranquilidad y un poquito de esperanza vemos cuando llegan los donativos de todo el mundo, de todos los lugares, de todas las personas que buenamente apoyaron y siguen apoyando sin importar que sea, sin importar sacrificar su propia comida (bienaventurados los de buen corazón), y es que antes de todo debemos ser realmente humanos no ajenos al dolor y al sufrimiento de nuestros hermanos, es como lo que dice Beto Ortiz en el artículo que ha publicado hoy para Perú 21: “Aunque tengas el don de la profecía y entiendas todos los misterios y poseas toda la riqueza y todo el conocimiento. Aunque tengas toda la fe y muevas todas las montañas. Si no tienes amor, no eres ni mierda”
Para terminar cito al gran Vallejo:
Dios mío, si tú hubieras sido hombre,
Lo que vende es lo que puede generar emociones.
Tomando esta premisa, desde hace dos semanas los medios nos bombardean todos los días con escenas totalmente arrolladoras de dolor, que nosotros al frente de nuestra TV y echados cómodamente en nuestras calientes camitas, vemos como meros espectadores, levantándonos al día siguiente creyendo que lo que vimos fue parte de una irrealidad… es el efecto “no sé que mierda” ese que nos produce esa sensación (maldita televisión).
Pero regresemos a nuestras cada vez más cómodas camitas ¿ya?
Miles de imágenes se me vienen a la mente, gente llorando por la pérdida de sus seres queridos, de sus casas… y de todo lo que con un huevo de esfuerzo llegaron a realizar a lo largo de una vida llena de sufrimientos (bienaventurados los pobres…que son los más en esta triste historia y que son los que siempre sufrirán)
Me siguen bombardeando con imágenes de gente regada en las plazas de armas, muertos inertes que ya no sufrirán más…curiosamente una cámara se queda fija hasta que alguien reconoce a un hijo, un sobrino, un padre o una madre y se echa a llorar como un niño totalmente indefenso que se perdió una tarde mientras paseaba con sus padres, indefenso, totalmente desamparado ante la fuerza de la naturaleza, ante la inclemencia y los designios de Dios. (¿Dios sabe realmente lo que hace?)
Entrevistas, testimonios y más imágenes a lo largo de los días llegan a mi televisor. “¿Por qué nos has hecho esto Dios?”, más que a pregunta suena a reclamo totalmente archivado y guardado en una fría oficina del poder judicial, porque ya sabemos que ningún reclamo es válido ya.
“Lloraremos a nuestros muertos, y luego a volver a reconstruir nuestras casas y a empezar de nuevo”, sentencia un señor que estoy seguro tiene el dolor más grande del mundo clavado en todo su ser (como todos por allá)…pero que más le queda, si ya no tiene otra salida.
Pero más allá de los bombardeos de dolor que veo todas las noches en mi TV, los medios también se encargaron de unirnos como hermanos, y poder apoyar en algo a la gente que realmente la está pasando hasta la hueva; al menos algo de tranquilidad y un poquito de esperanza vemos cuando llegan los donativos de todo el mundo, de todos los lugares, de todas las personas que buenamente apoyaron y siguen apoyando sin importar que sea, sin importar sacrificar su propia comida (bienaventurados los de buen corazón), y es que antes de todo debemos ser realmente humanos no ajenos al dolor y al sufrimiento de nuestros hermanos, es como lo que dice Beto Ortiz en el artículo que ha publicado hoy para Perú 21: “Aunque tengas el don de la profecía y entiendas todos los misterios y poseas toda la riqueza y todo el conocimiento. Aunque tengas toda la fe y muevas todas las montañas. Si no tienes amor, no eres ni mierda”
Para terminar cito al gran Vallejo:
Dios mío, si tú hubieras sido hombre,
hoy supieras ser Dios;
pero tú, que estuviste siempre bien,
no sientes nada de tu creación.
¡Y el hombre sí te sufre: el Dios es él!
Bueno hermanos, disculpen la tristeza!!! Pero así de mierda es la realidad…y es que siempre dan ganas de llorar)
Dejo el link del artículo citado: http://www.peru21.com.pe/comunidad/Columnistas/Html/ortizIndex.html
Recomiendo tener un vaso de agua a la mano al momento de leerlo, te lo dice un pobre huevón que también y más que todo también es un pobre llorón
Dejo el link del artículo citado: http://www.peru21.com.pe/comunidad/Columnistas/Html/ortizIndex.html
Recomiendo tener un vaso de agua a la mano al momento de leerlo, te lo dice un pobre huevón que también y más que todo también es un pobre llorón
